20 de enero de 2010

THE WESTIN
















LUJO:(Del latín, luxus) Abundancia de cosas no necesarias.


El Westin es un pedazo de hotel que hay en Valencia. En noviembre estuvimos alojados en él durante una semana, a la vez también estuvimos rodando dentro durante 5 días.
La semana pasada volvimos a Valencia, Angela la eficiente secretaría de la oficina, nos reservó habitaciones en un hotel de la cadena Silken. Rápidamente llamé al Westin y conseguí un gran precio, por lo cual cancelamos la reserva y nos instalamos en este último. Porque privarse de vivir a cuerpo de rey por el mismo precio…
Podría decir que nuestra estancia de noviembre fue una nueva experiencia profesional ya que rodábamos en el mismo sitio en el que vivíamos. El rodaje era en el mismo pasillo donde teníamos la habitación, en los ascensores, en recepción. La gente del equipo no preguntaba donde estaba el baño, iba al de su propia habitación, después de la comida había tiempo para echarse un siestita, etc. Eso sí, nadie se atrevió a bajar en zapatillas que hubiera sido lo más normal. Nunca mejor dicho lo de “uno nunca se va a la cama sin aprender algo nuevo”
En mi primera visita me asignaron la 148. Una habitación con sala, 2 cuartos de baño con multitud de toallas, inmensa cama de 2x2 con 8 almohadas, bandeja de frutas…Todo un detalle por parte de la dirección del hotel. Pues para esta segunda estancia se han superado, me dieron la 258 denominada Deluxe y para Vips. A primera vista era muy similar a la 158 pero enseguida descubrí los detalles que la hacían diferente, botella de vino en la sala, bombones sobre la cama, perfumes en el baño y una terraza. Entré en la terraza y tenía un pedazo de yacuzzi. Viendo todas estas características enseguida decidí que había que sacarle rendimiento así que abrí la botella y me metí en le yacuzzi, estaba 34 grados, temperatura perfecta para ser enero y con 5 grados de temperatura ambiente. Esto fue repetido durante cinco días, más que nada para mostrar mi agradecimiento a la dirección del hotel. Que buena gente.
Siempre me ha gustado pasar temporadas en hoteles y durante los 5 últimos meses del año que acaba de terminar así ha sido, matizar que 4 de ellos fueron en el Melía Alicante de menor categoría pero con su encanto y sobre el que otro día haré una entrada. Esto me lleva a recordar los míticos hoteles donde las estrellas de Hollywood daban rienda suelta a sus fantasías o donde se instalaban para pasar largas temporadas, El Chateu Marmont en Sunset, el Roosevelt en Hollywood, el Chelsea en Manhattan, etc..Que grandes momentos para el que pudo vivirlos.
Es un placer que te atiendan, desayuno americano todas las mañanas, sábanas y toallas limpias, te recogen la habitación y si encima de atenderte te miman...
La única pega es la pena de no haber podido compartir mis estancias en el Westin, en el Melía fue diferente. Otra vez será.

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